Shinigami Publicado 3 de Agosto del 2011 Reportar Share Publicado 3 de Agosto del 2011 En despachos próximos al de la presidenta Cristina Kirchner se le achaca al gobernador no haber manejado bien la situación y el “desmadre” de su policía en la represión del jueves pasado. Pero valoraron su decisión de remover a su ministro de Gobierno y a varios jefes policiales , medidas por otra parte que le fueron requeridas por la Rosada como forma de poner paños fríos al conflicto. Sin embargo, en la estrategia de respaldo oficial hicieron ruido unas declaraciones del secretario de Medios, Juan Abal Medina, que contradijeron la versión de la provincia de que no hubo muertos por balas policiales. “Hubo armas de un lado y armas del otro ... no es posible ni gobernar ni protestar con las armas en la mano”, señaló Abal, quien pareció salirse del libreto oficial. Pero la premisa oficial de la Casa Rosada es “pacificar y dar una respuesta social” a los reclamos por tierras y viviendas. En esa línea fue que la Legislatura jujeña aprobó anteanoche la expropiación de 40 hectáreas del ingenio Ledesma. El Gobierno quiere aquietar las aguas revueltas: en dos semanas tendrán lugar las elecciones primarias y el candidato a gobernador del kirchnerismo es Eduardo Fellner, el actual presidente de la Cámara de Diputados. Barrionuevo responde a Fellner, el verdadero poder en la provincia detrás de la figura del actual gobernador. El ministro del Interior, Florencio Randazzo, manejó el caso tanto con Fellner como con Barrionuevo, dos figuras que aparecen con frecuencia en las fotos junto a Cristina Kirchner. El gobernador dijo ayer en conferencia de prensa que contaba con el apoyo del Gobierno nacional y le apuntó a “los aprovechadores de siempre que están abusando de la gente”. Fellner había hecho declaraciones el viernes (luego se corrió de escena); habló de “utilización política” y deslizó sospechas sobre la secuencia en que se produjeron los hechos. Ayer, en la Casa Rosada se mencionaba sin muchas precisiones la palabra “infiltrados” y se resaltaba que las muertes fueron por armas calibre 22 (la policía utiliza 9 mm). Próximos a las teorías conspirativas, en algunos despachos mentaban la presunta cercanía de dirigentes de la CCC con Eduardo Duhalde, el fantasma favorito que le gusta sacar a relucir al kirchnerismo. Pero se reconocía que no había ninguna prueba para responsabilizar a nadie con nombre y apellido. Para preservar al gobernador kirchnerista, desde el Gobierno -también en organizaciones sociales filokirchneristas que acompañaron ayer las protestas- traslució la intención de apuntar la responsabilidad al muy cuestionado juez que ordenó el operativo de desalojo, y a la empresa Ledesma propietaria de las tierras. Fuentes empresarias de Jujuy coinciden en que esa sería la lectura que intenta imponer el Gobierno, y estimaron que el gobernador buscará sortear la crisis permitiendo que se sigan tomando tierras sin reprimir -como ocurrió ayer-, para descomprimir la situación política. Al menos hasta que llegue el día de las elecciones. Fuente Enlace al comentario Compartir en otros sitios web More sharing options...
Publicaciones recomendadas
Crear una cuenta o conéctate para comentar
Tienes que ser miembro para dejar un comentario
Crear una cuenta
Regístrese para obtener una cuenta nueva en nuestra comunidad. ¡Es fácil!
Registrar una nueva cuentaConectar
¿Ya tienes una cuenta? Conéctate aquí.
Conectar ahora